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Los gremios de infraestructura e ingeniería dijeron que la idea del Gobierno es antitécnica.

Los presidentes de la Cámara Colombiana de la Infraestructura y la Sociedad Colombiana de Ingenieros, Juan Martín Caicedo Ferrer y Daniel Flórez Pérez, respectivamente, rechazaron ayer la propuesta del ministro de Transporte, Germán Cardona, sobre anticipos del 10 por ciento en obras públicas, la cual calificaron de antitécnica.

En un comunicado, los dirigentes gremiales dijeron que no se puede estigmatizar injustamente a los contratistas que hacen buen uso del anticipo, que son sin duda la mayoría.

Agregan que el sobredimensionamiento mediático de los casos puntualesderiva en la injusta creencia de que el mal uso de los anticipos constituye la regla general.

“Se trata de una propuesta antitécnica, porque el monto del anticipo debe asociarse al flujo de caja, los plazos, y las características de los proyectos”.

Indicaron que esta propuesta constituye golpe de muerte para las pequeñas y medianas empresas de ingeniería, que usualmente financian el despegue de los proyectos con el anticipo.

En opinión de los directivos, esto fomenta la concentración de la contratación en cabeza de grandes empresas con músculo financiero.

Sostienen que la iniciativa encarece los proyectos, pues los contratos tendrán que asumir los costos financieros en que se incurran, a falta del anticipo.

“La solución de los problemas del anticipo depende, más bien, de los controles que se establezcan para evitar su mal uso”.

Caicedo y Flórez dicen que el propio Gobierno acaba de dejar intacta la figura del anticipo en el Estatuto Anticorrupción, pero establece el sistema de fiducia y el patrimonio autónomo.

“Sorprende que esta discusión, que surgió de un debate sobre si los concesionarios viales deben o no recibir medios de pago antes de terminar la obra, haya derivado en un golpe de gracia al normal desarrollo de los contratos de obra pública, que son una cosa bien distinta.

Finalmente, aseguran que este es un “flaco favor el que le hace el Ministerio a la ingeniería de bien -a la cual pertenece el Titular de la Cartera-, al fijar criterios para la contratación, al ritmo de la actuación indebida de algunos irresponsables”.